- Mango 200 gr. (yo utilice un mango)
- Una cebolla pequeña 60 gr.
- Azúcar moreno 50 gr.
- Vinagre de manzana 125 ml.
- 1 diente de ajo picado muy pequeño.
- 1 cucharadita de jengibre fresco rallado.
- 1 cucharadita de canela.
- 1/2 cucharadita de pimienta negra.
- 1/4 cucharadita de las de moka de sal.
- Agua 100 ml.
- Sésamo para decorar (opcional).
- Aceite.
ELABORACIÓN:
Picamos la cebolla en brunoise muy finita. Cortamos el mango el trozos pequeños. Ponemos un poco de aceite a calentar en una cazuela a fuego medio y añadimos la cebolla, el mango, el vinagre y el azúcar.
Dejamos al fuego unos 15 min.
Cuando la mezcla ha reducido, añadimos el jengibre rallado, el ajo picado, la canela, la pimienta negra, la sal y el agua. Mezclamos bien y dejamos cociendo en el fuego hasta que la mezcla vuelva a reducir (unos 20 min).
Cuando la mezcla ha reducido, añadimos el jengibre rallado, el ajo picado, la canela, la pimienta negra, la sal y el agua. Mezclamos bien y dejamos cociendo en el fuego hasta que la mezcla vuelva a reducir (unos 20 min).
Podemos dejar así el chutney o pasarlo por la batidora. Yo, dependiendo para que lo vaya a usar, lo paso o no. En este caso lo he triturado un poco. Pasamos a un bol y decoramos con el sésamo.
NOTAS:
El chutney de mango es un acompañamiento ideal para carnes como el cerdo (con un solomillo al horno queda genial) o el pollo.
También se puede utilizar para acompañar pastas, si queremos darles un toque más refrescante (en este caso yo no trituro el chutney).
NOTAS:
El chutney de mango es un acompañamiento ideal para carnes como el cerdo (con un solomillo al horno queda genial) o el pollo.
También se puede utilizar para acompañar pastas, si queremos darles un toque más refrescante (en este caso yo no trituro el chutney).
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